El libro de texto

El libro de texto 335101525 16, 2011 2 pagos Introducción: Hablar de materiales curriculares en general y de libros de texto en particular es un tema de total actualidad. Por eso presento una investigación y los temas que en ella se plantean – libros de texto y profesionalidad – pertenecen al ámbito de los grandes problemas de la enseñanza que constituyen, a su vez, grandes soluciones a la tarea y el oficio de enseñar.

Empecé a interesarme por los materiales curriculares, como elemento que influye en la práctica profesional, en mis observaciones, prácticas de ensayos y residencias; y pude onstatar el enorme peso que los libros de texto tienen en la práctica docente de los profesores y la forma en que suplantan a éstos en la toma de decisiones en el aula. Esta idea, que puede verse de forma muy clara en la ráctica la expresa J.

Gimeno de la forma siguiente: ora «El profesor puede ut a os recursos Sv. ipe to que siente necesario ero estructuradores de técnica en su actuaci nci e los medios e descalificación efinitiva, lo que ocurre con los propios libros de texto: no son solamente recursos para ser usados por el profesor y los alumnos, sino que pasan a ser los verdaderos vertebradores de la práctica edagógica» (1988, pag. 187).

He podido observar el papel que los materiales de desarrollo curricular juegan respecto al trabajo en equipo entre profesores y, por tanto, respecto a su desarrollo profesional: Los materiales curriculares que se utilizan pueden d Swipe to vlew next page dificultar o impedir la colaboración profesional si sus propuestas son demasiado cerradas, y hacer innecesario que los equipos docentes, ciclos o departamentos se reúnan para llegar a acuerdos.

Es preciso, por tanto, que desde las agencias que elaboran estos materiales se tomen medidas para que ontengan propuestas que permitan, incluso aconsejen, el trabajo colaborativo de los profesores que los utilizan en sus aulas. » (A. López Hernández, 2007, Pág. 167) En la actualidad muchos docentes utilizan el libro de texto como un currículum, se aferran a el, y planifican en base a los contenidos que tiene este. No dan lugar a otras propuestas, como por ejemplo que ellos elaboren una actividad sin extraerla de ningún libro.

Algunas docentes utilizan varios libros para planificar las actividades, esto nos permite suponer que el libro sigue siendo el organizador de las clases. Es frecuente escuchar que algunos dicen que el libro de texto es una de las principales he–. rramientas pedagógicas de los docentes; a partir de él planifican su clase, deciden qué y cómo enseñar, y extienden la enseñanza más allá del aula, programando tareas para casa.

Pero como toda herramienta, un nuevo libro de texto es adoptado si la experiencia demuestra su utilidad, si se adapta a la idea que el maestro tiene de la enseñanza y si el maestro se siente preparado para emplear-,la. Pensando sobre el uso que le dan los docentes al libro de texto, me propuse realizar este trabajo para indagar que representa para ellos el mismo.